Tomás Berra, defensor que actualmente milita en S.S.D. Cittá di Messina de la Serie D de Italia, habló en exclusiva con Falso Nueve, en donde se refirió a su carrera, sus enseñanzas, la diferencia entre la vida en Italia y Argentina, y cómo se vive con el Coronavirus.
Comenzando, contó una divertida anécdota sobre su apodo: "El apodo nació en un partido de Playstation, con Nery Dominguez, Fernando Coniglio y Franco Peppino. Estábamos jugando, yo con Coni, y erró un gol, por lo que yo le dije “dale iguana pálida” y Peppino se tentó, nos tentamos todos, paramos el partido. Llegó la hora de comer, concentrando en una pretemporada con Central y ahí arrancó Peppino a decirme iguana y sin querer queriendo quedó".
Luego, recordó el memorable clásico frente a Newell's, con triunfo Canalla por 1 a 0: "Ayer justo se cumplieron 6 años. Para mí fue una locura, yo tenía 5 o 6 partidos, fue algo muy lindo. Uno siendo jugador de Central desde los 6 años, pasando por todas las categorías, conocí a todo el mundo, toda la gente que me conoce sabe lo enfermo que soy por Central. Fue una locura, se te viene todo a la cabeza. En ese clásico parecía que íbamos de punto, pero gracias a Dios pasó al revés". Además, agregó: "Cada día de mi vida quiero volver a Central. Nunca fui tan felíz en un lugar como lo fui ahí. Ojala algún día tenga la posibilidad de volver".
Sobre su paso en Central, elogió a Miguel Ángel Russo: "Fue el que me dio la oportunidad de vivir de lo que yo amo, sin dudas. Por más que uno laburó mucho, se cuidó mucho, Miguel le puso la frutilla al postre de mi carrera. El me dio la mano, confió en mí, el me dio eso. Todas las semanas me lo hacía saber, siempre se manejó con mucho respeto. Se puso el como escudo delante de los chicos y hoy en día eso no pasa mucho". También, destacó a sus compañeros:"Me ha tocado jugar con mucha gente con experiencia y te das cuenta que al fin y al cabo es la humildad lo que te hace grande. Ver a esa gente con 35, 36 años, entrenando como entrenaban, viendo cómo te trataban. Con esas cosas me quedo, más que con lo que la gente se queda en la cancha. El día a día importa más".
Siguiendo con su carrera, habló por su paso Godoy Cruz: "Fue una locura, uno de los mejores a nivel persona, jugador. Teníamos un grupo hermoso, yo llegué allá y conocía a un montón de compañeros. Se formó esa mezcla de pibes de 20 a 26 años que estaban todos en la misma. La relación que tenía con Lucho Abecasis la tenía con un montón, al día de hoy sigo hablando con varios. Había una buena onda terrible, Mendoza también te dejaba hacer eso, estábamos todos cerquita. Fue un plantel muy joven y maduro, por algo llegamos a todo lo que se peleó. Fue un paso hermoso, sinceramente aparte de jugar al fútbol se armó un hermoso grupo, con un cuerpo técnico impecable. No se si éramos los mejores, pero todos sumábamos muchísimo. Llegué luego de una lesión muy larga, de casi más de un año sin jugar. Me di cuenta del espacio que tenía que tomar y que era aconsejar al más chico. Era una familia".
Continuando con sus dichos, especificó su amistad con Luciano Abecasis: "Lo conozco de inferiores, él es un año más grande que yo. Nos conocíamos pero no teníamos la relación de hoy en día. Fue en Godoy Cruz donde nos conocimos mucho mejor, en el 2016, que llegamos juntos. Concentramos siempre juntos. Vino este loco lindo que teníamos 3 meses de conocidos, pero parecíamos amigos de toda la vida. Fue poco tiempo donde vivimos cosas muy lindas en el club, con mucha química, saliendo a comer, tomando mates, haciendo jodas. Un poco de todo".
Por último, relacionado a su carrera como jugador, se refirió a su actualidad en Italia: "Llegué por un representante que su mujer era argentina, hincha de Central y me contó el que consiguió mi número y me trajo para acá. Yo no lo conocía a él. La categoría no será la más alta, pero a lo que es una B Nacional en Argentina le compite bastante de cerca, más que nada por el cambio de la moneda". Y sumó, relacionado con la actualidad de los clubes: "Tenés de todo, los 4 o 5 de cada grupo están bien, pagan bien, y los de más abajo, pagan todo porque son bastante cumplidores, aunque hay excepciones. Uno viene porque acá puede ahorrar. En Argentina podría estar en un nivel más alto pero no podría ahorrar, y al fin y al cabo uno hace esto como un trabajo".
Cambiando un poco de tema, charló sobre cómo se vive el día a día con el Coronavirus: "Es muy complicado, ayer hubo varias muertes. Hace 3 semanas que no bajan de los 600 muertos por día, es un momento feo. Yo estoy tranquilo, en el medio de una montaña, en donde casi no hay habitantes. Calculo que cada uno por los diarios sabrá un poco la situación".
Y comparó las formas de vida entre Italia y Argentina: "Yo me quedo con Argentina, por más que tengamos más de un millón de defectos, por más que de seguridad no se pueda hablar, que en respeto no se compare. Yo me quedo con el día a día del argentino, que es mucho más amiguero, que se junta cada dos o tres días. Es mucho más de grupo. Acá es mucho más reducido. Esa es la diferencia más grande, no se toman esa hora y media para tomarse mates con los amigos. En cuanto a sociedad en Italia están un paso más adelante. Venís por una calle muy transitada, frenan y te dejan pasar. Pasan cosas que en Argentina no van a pasar".
Yendo a otros temas, se mostró agradecido a su familia: "Mi familia es todo. Me apoyo mucho en ellos, me hacen mucha falta. Acá yo estoy bien, estoy tranquilo. Ellos son un gran sostén, al verlos bien, yo estoy tranquilo acá lejos de ellos. Son por lo que sigo en pie, cuando a uno se le viene el mundo abajo. Hablas con ellos y pensas que tenés que hacerlo por esta gente que me dice que no baje los brazos."
Para cerrar, contó sus expectativas luego de su retiro:"Hace poco pensaba en eso. Voy a seguir relacionado al fútbol porque es lo que más me gusta, porque me apasiona. Me gusta mucho la táctica, como es el entrenamiento. No se si el mundo del fútbol es lindo, pero me encanta estar en el entrenamiento. Tengo anotados ejercicios, me encantaría ser técnico. De cada uno que voy teniendo voy sacando trabajos o manera de hablar. Tengo todo anotado. No sé qué seré, pero va a ser algo relacionado con el fútbol".
Comenzando, contó una divertida anécdota sobre su apodo: "El apodo nació en un partido de Playstation, con Nery Dominguez, Fernando Coniglio y Franco Peppino. Estábamos jugando, yo con Coni, y erró un gol, por lo que yo le dije “dale iguana pálida” y Peppino se tentó, nos tentamos todos, paramos el partido. Llegó la hora de comer, concentrando en una pretemporada con Central y ahí arrancó Peppino a decirme iguana y sin querer queriendo quedó".
Luego, recordó el memorable clásico frente a Newell's, con triunfo Canalla por 1 a 0: "Ayer justo se cumplieron 6 años. Para mí fue una locura, yo tenía 5 o 6 partidos, fue algo muy lindo. Uno siendo jugador de Central desde los 6 años, pasando por todas las categorías, conocí a todo el mundo, toda la gente que me conoce sabe lo enfermo que soy por Central. Fue una locura, se te viene todo a la cabeza. En ese clásico parecía que íbamos de punto, pero gracias a Dios pasó al revés". Además, agregó: "Cada día de mi vida quiero volver a Central. Nunca fui tan felíz en un lugar como lo fui ahí. Ojala algún día tenga la posibilidad de volver".
Sobre su paso en Central, elogió a Miguel Ángel Russo: "Fue el que me dio la oportunidad de vivir de lo que yo amo, sin dudas. Por más que uno laburó mucho, se cuidó mucho, Miguel le puso la frutilla al postre de mi carrera. El me dio la mano, confió en mí, el me dio eso. Todas las semanas me lo hacía saber, siempre se manejó con mucho respeto. Se puso el como escudo delante de los chicos y hoy en día eso no pasa mucho". También, destacó a sus compañeros:"Me ha tocado jugar con mucha gente con experiencia y te das cuenta que al fin y al cabo es la humildad lo que te hace grande. Ver a esa gente con 35, 36 años, entrenando como entrenaban, viendo cómo te trataban. Con esas cosas me quedo, más que con lo que la gente se queda en la cancha. El día a día importa más".
Siguiendo con su carrera, habló por su paso Godoy Cruz: "Fue una locura, uno de los mejores a nivel persona, jugador. Teníamos un grupo hermoso, yo llegué allá y conocía a un montón de compañeros. Se formó esa mezcla de pibes de 20 a 26 años que estaban todos en la misma. La relación que tenía con Lucho Abecasis la tenía con un montón, al día de hoy sigo hablando con varios. Había una buena onda terrible, Mendoza también te dejaba hacer eso, estábamos todos cerquita. Fue un plantel muy joven y maduro, por algo llegamos a todo lo que se peleó. Fue un paso hermoso, sinceramente aparte de jugar al fútbol se armó un hermoso grupo, con un cuerpo técnico impecable. No se si éramos los mejores, pero todos sumábamos muchísimo. Llegué luego de una lesión muy larga, de casi más de un año sin jugar. Me di cuenta del espacio que tenía que tomar y que era aconsejar al más chico. Era una familia".
Continuando con sus dichos, especificó su amistad con Luciano Abecasis: "Lo conozco de inferiores, él es un año más grande que yo. Nos conocíamos pero no teníamos la relación de hoy en día. Fue en Godoy Cruz donde nos conocimos mucho mejor, en el 2016, que llegamos juntos. Concentramos siempre juntos. Vino este loco lindo que teníamos 3 meses de conocidos, pero parecíamos amigos de toda la vida. Fue poco tiempo donde vivimos cosas muy lindas en el club, con mucha química, saliendo a comer, tomando mates, haciendo jodas. Un poco de todo".
Por último, relacionado a su carrera como jugador, se refirió a su actualidad en Italia: "Llegué por un representante que su mujer era argentina, hincha de Central y me contó el que consiguió mi número y me trajo para acá. Yo no lo conocía a él. La categoría no será la más alta, pero a lo que es una B Nacional en Argentina le compite bastante de cerca, más que nada por el cambio de la moneda". Y sumó, relacionado con la actualidad de los clubes: "Tenés de todo, los 4 o 5 de cada grupo están bien, pagan bien, y los de más abajo, pagan todo porque son bastante cumplidores, aunque hay excepciones. Uno viene porque acá puede ahorrar. En Argentina podría estar en un nivel más alto pero no podría ahorrar, y al fin y al cabo uno hace esto como un trabajo".
Cambiando un poco de tema, charló sobre cómo se vive el día a día con el Coronavirus: "Es muy complicado, ayer hubo varias muertes. Hace 3 semanas que no bajan de los 600 muertos por día, es un momento feo. Yo estoy tranquilo, en el medio de una montaña, en donde casi no hay habitantes. Calculo que cada uno por los diarios sabrá un poco la situación".
Y comparó las formas de vida entre Italia y Argentina: "Yo me quedo con Argentina, por más que tengamos más de un millón de defectos, por más que de seguridad no se pueda hablar, que en respeto no se compare. Yo me quedo con el día a día del argentino, que es mucho más amiguero, que se junta cada dos o tres días. Es mucho más de grupo. Acá es mucho más reducido. Esa es la diferencia más grande, no se toman esa hora y media para tomarse mates con los amigos. En cuanto a sociedad en Italia están un paso más adelante. Venís por una calle muy transitada, frenan y te dejan pasar. Pasan cosas que en Argentina no van a pasar".
Yendo a otros temas, se mostró agradecido a su familia: "Mi familia es todo. Me apoyo mucho en ellos, me hacen mucha falta. Acá yo estoy bien, estoy tranquilo. Ellos son un gran sostén, al verlos bien, yo estoy tranquilo acá lejos de ellos. Son por lo que sigo en pie, cuando a uno se le viene el mundo abajo. Hablas con ellos y pensas que tenés que hacerlo por esta gente que me dice que no baje los brazos."
Para cerrar, contó sus expectativas luego de su retiro:"Hace poco pensaba en eso. Voy a seguir relacionado al fútbol porque es lo que más me gusta, porque me apasiona. Me gusta mucho la táctica, como es el entrenamiento. No se si el mundo del fútbol es lindo, pero me encanta estar en el entrenamiento. Tengo anotados ejercicios, me encantaría ser técnico. De cada uno que voy teniendo voy sacando trabajos o manera de hablar. Tengo todo anotado. No sé qué seré, pero va a ser algo relacionado con el fútbol".